La Fiscalía de Instrucción de Cruz del Eje, a cargo de Sabrina Ardiles, imputó a tres efectivos del Equipo Táctico de Operaciones Recomendadas (ETER) con base en Deán Funes. Los agentes están acusados de lesiones leves calificadas y robo en perjuicio de un adolescente de 13 años, un hecho que conmocionó a la comunidad local.
El hecho ocurrió el 25 de octubre, cuando el menor se dirigía en bicicleta hacia su casa. Según la investigación, fue interceptado por un móvil policial, cuyos ocupantes habrían utilizado violencia física y expresiones humillantes durante el procedimiento. El certificado médico detalla lesiones en el cuello y la muñeca izquierda del joven.
Testigos aseguraron que el adolescente había discutido con un amigo minutos antes, pero el altercado había finalizado. A pesar de ello, los policías lo detuvieron sin motivo aparente y sin dejar registro oficial del operativo, lo que agrava su accionar.
La madre del menor presentó la denuncia después de ser alertada por un amigo de su hijo. Para la fiscal Ardiles, el accionar de los efectivos del ETER fue desmedido e injustificado, excediendo los límites de un procedimiento legítimo.
El caso reaviva el debate sobre el control del uso de la fuerza policial en la provincia de Córdoba y la necesidad de reforzar los mecanismos de supervisión y denuncia.
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